El seguro de Vida siempre ha estado ahí, como ese “plan B” que te protege a ti y a tu familia en los momentos más difíciles. Pero algo está cambiando: los jóvenes de hoy no piensan ni viven igual que las generaciones anteriores. Y ojo, que esto no lo decimos nosotros, lo dice el Informe Mundial de Seguros de Vida 2026 de LIMRA y Capgemini.
El informe revela que el 68% de los adultos menores de 40 años considera esencial el seguro de Vida para un futuro financiero estable. Sin embargo, la mayoría siente que los productos actuales no encajan con sus prioridades.
En resumen:
Y aquí la paradoja: mientras muchos lo descartan por “no encajar con su vida actual”, saben que en el futuro heredarán patrimonio y valoran el seguro de Vida como parte de esa planificación financiera.
El sector se enfrenta al reto de reinventar el seguro de Vida. Ya no vale con venderlo como “protección en caso de fallecimiento”. Los jóvenes quieren valor inmediato, productos flexibles, accesibles y que no dependan de dónde trabajen.
Además:
En nuestro país la foto es curiosa:
Las claves: más flexibilidad, procesos simples, asesoramiento reforzado con IA y hasta experiencias gamificadas para que la relación con el seguro no sea un tostón.
Que el seguro de Vida no está muerto ni mucho menos, pero sí necesita adaptarse. Los jóvenes quieren productos que les acompañen en su estilo de vida, con claridad, beneficios reales y sin papeleo absurdo.
En Segurifach lo tenemos claro: nuestro trabajo es traducir el lenguaje del seguro a un idioma que cualquiera entienda, y acompañar a cada persona para que encuentre la solución que de verdad le encaje. Ni más ni menos.